Estuve seriamente agripado durante 4 días, las drogas blandas expedidas por el gobierno no surtían el efecto deseado, la idea de convulsionarme seducía enormemente mi cabeza ya que desconocía la temperatura que mi cuerpo soportaba.
Al cuarto día me levante débil, moribundo, deseando sentirme de cualquier otro modo mejor, abrí al ventana del cuarto, me quite el suéter y volví a entregarme a los brazos de Morfeo con la vaga esperanza de poder despertar de esa pesadilla sintomática llamada fiebre.
Al caer profundamente dormido soñé con una mujer completamente desconocida que cuidaba de mí, al poner paños tibios en mi frente, mientras mi cabeza descansaba sobre sus rodillas. Ante mi completa curiosidad que tildaba en la sorpresa le pregunte: “¿Quien Eres?”
Ella me responde que es mi vecina y que vive en la casa de enfrente.
Curiosamente ante todo el suceso no puede verle la cara, ya que al intentar enfocar sus rasgos faciales, una cierta imagen difusa no me permitía apreciar su rostro.
Al despertar de una manera que no me lograba explicar la fiebre y toda su sintomatología se había ido, lo tome como un hecho curioso. Pero a la semana siguiente volví a verla a través de mis sueños en donde interactuábamos un poco más y me dice: “Hay ciertas cosas en ti que no me agradan del todo pero volveremos a vernos”
En esta ocasión puede ver con claridad su cara, así como su cabello y sus ojos.
Ante esa experiencia solo tengo 2 preguntas: ¿Quién es ella? Y ¿Será ella un invento de mi imaginación? ƒ
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